A la luna llena del próximo día 19, sábado, los astrónomos llaman “Súper Luna”, porque será la mayor luna llena que se haya visto en las dos últimas décadas. También la han bautizado como “Luna Gigante”, la mas cercana a la tierra desde entonces ( a 356.577 kms). El perigeo lunar marca el punto de mayor aproximación a la Tierra de este satélite durante su órbita.
Interpretaciones
El astrónomo norteamericano Richard Nolle: Astropro.com, la ha calificado como "súper Luna Extrema", y opina que el seísmo de Japón del 11 de marzo está relacionado con ella; predice además que son probables grandes tormentas, terremotos y explosiones volcánicas de diversa consideración durante el resto del año debido a este “fenómeno” lunar. Para hacer más valida su “hipótesis” recurre a la hemeroteca, relacionando episodios anteriores con este fenómeno lunar: inundaciones en Hunter Valley, Australia (1955), ciclón Tracy, también en Australia (1974), Huracán Andrew (1992), tsunami en el Océano Índico (2004) y huracán Katrina (2005). O el terremoto de pasado mes de febrero en Nueva Zelanda.
Sin embargo, ya ha sido desautorizado por la mayoría de sus colegas. Meteorólogos como Paul Walker; sismólogos como George Helfrich, de la universidad de Bristol, así como el astrónomo David Harland y expertos de la NASA como Dave Williams, le contradicen con diversos datos. Dave Williams, por ejemplo, afirma que “cuando se produjo el terremoto de Japón, la luna estaba realmente más cerca de su punto más lejano de la Tierra -apogeo- que de su punto más cercano del 19 de marzo”. La Luna, afirman, no tiene efectos sobre los terremotos”. Este dictamen ha sido apoyado por el Servicio Geológico de Estados Unidos, quien por boca del geofísico John Bellini mantiene que, el terremoto de Sendai “es completamente ajeno al perigeo lunar”.
Otros estudiosos recuerdan que actualmente se está produciendo una tormenta geomagnética resultado de las últimas erupciones solares ocurridas el pasado 15 de febrero y 9 de marzo, que les lleva a deducir la posibilidad de que el terremoto de Japón pudiera haber sido, en parte, provocado por la concatenación de fenómenos astrofísicos.
Pronto podremos visualizar esa hermosa luna, perpetuo faro de la tierra