La democracia de las élites y sus mafias


Más del 80% de la riqueza mundial está en manos de un 1% de la población. Ya es sabido; los ricos cada vez más ricos, los pobres y trabajadores/as cada vez más "miserables", también en los países supuestamente avanzados, o sea, los occidentales, donde las bolsas de miseria y exclusión social+ inmigración no deseada es mirada de soslayo por los consumidores decentes y obedientes al estaus quo, aquellos que no se dan cuenta de que el enemigo no viaja en patera, si no en limusina, especialmente en EEUU, donde las desigualdades sociales son mayores que en Europa, mucho más tras la victoria del machista-racista, fanfarrón y neo nazi; el millonario que utiliza trucos fiscales para evitar pagar impuestos: Donald Trump. 

La España del Estado de Derechas 


Las políticas de derechas que benefician a minorías privilegiadas y priorizan a grupos de presión económica; trasnacionales, banqueros y a sus servidores, corruptos o no (partidos políticos) son la realidad que vive nuestro mundo desde hace décadas, también en España, donde las izquierdas no han tocado poder real nunca. Cuando se intentó y ganó la República en las urnas se vivían tiempos convulsos y acabó demasiado pronto, al desembocar en una guerra civil provocada por la invasión de las tropas fascistas de Franco con la ayuda de Hitler y Musolini y el lavado de manos de Europa. 

Tras las primeras elecciones democráticas y elaboración de la Constitución de 1978 negociada con el último gobierno post franquista de Suárez e imposición de la Monarquía parlamentaria (que nos dejó Franco de herencia), la democracia para todos sigue siendo una utopía.

En España ha aumentado la desigualdad, la pobreza, los contratos basura y la precariedad labor al, y han bajado los sueldos un 30%, en una década a excepción de suertudos titulados o técnicos y banqueros enchufados o pelotas, amén de empresarios untados de las diversas ramas (sus líderes políticos se subieron el sueldo un 25%). Las pensiones suben lo mínimo legal, un 0,25%; o sea 1€ con 0, 42 o 0,50 céntimos, para cientos de miles de pensionistas que no llegan nunca a los 6oo euros mensuales. 

Tantos/as trabajando 30 años o más o menos y cotizando a la Seguridad Social. Y tantos, sobre todo tantas trabajando muchas veces a tiempo completo, caso de interinas/sirvientas o amas de casa, limpiadoras de hoteles y derivados, con sueldos de miseria y sin ser dadas de alta o muy tarde, o cotizando la mitad de horas trabajadas ¿Dónde se esconden los/as inspectores de trabajo?.

¿Dos caras de la misma moneda?

Y a todo eso llama el poder corrupto recuperación económica. En relación con nuestros vecinos más allegados Alemania o Francia estamos en la cola, junto a Grecia y algunos países del este. Las clases medias cada vez más proletarizadas; licenciaturas de todas las disciplinas con pocas salidas y sumisas frente al voraz mercado; becarios/as eternos sin poder cotizar, incluso trabajando en ocasiones gratis para sus superiores, que se ahorran el trabajo. 

Profesiones liberales o técnicas y manuales de todo tipo con contratos eventuales, tantos de días u horas, o sin contrato (free lance de prensa, autónomos que trabajan para autónomos...). Y otros tantos trabajos que en poco tiempo se verán amenazados por la robótica que viene y que se ampliará a trabajos menos deseados ¿Qué será de la gente?.

El Planeta tiembla 

Y pese a todo, mirar más allá de nuestro ombligo y ubicación geográfica produce vértigo y vergüenza. Si todo está relacionado, la avaricia de los pocos que dirigen la marcha del mundo ¿Cuál es la propia responsabilidad de quienes obedecen? ¿Cómo intentar cambiar el rumbo? El Planeta tiembla por la crueldad de sus amos y funcionarios en la deriva consumista extrema y sus consecuencias.

El Planeta sufre, tan manipulado en las últimas décadas, y devuelve su furor en fenómenos atmosféricos cada vez más frecuentes y devastadores; sufren más quienes habitan zonas más predispuestas geográficamente, al igual que sus habitantes, o en los deshielos gigantescos, terremotos, sutnamis, incendios o sequías, y casi siempre ese furor se ceba en los países más pobres e intervenidos in eternum; también en el nuestro (Galicia)

Los amos globales son antíguos, se parecen a aquellos primeros colonizadores-invasores de lo ajeno. En realidad nunca se fueron del todo, cambiaron la terminología y los modos, negociaron y convocaron a elecciones cada 4 años, a lo que añadieron eslóganes creíbles para mucha gente de buena fé, reconvirtiéndose en demócratas, caso de monarquías antiguas, para así conservar sus privilegios. Y repartieron limosnas.


Mafias de lo público 

Quienes hablan de sentido común, estabilidad y recuperación de la economía, son los políticos y fieles vasallos, bien pagaos, de algunos poderes invisibles (esos que no se presentan a elecciones). Viven del esfuerzo y los impuestos de todos mientras ellos los evaden y guardan lo robado en paraísos fiscales. 

Son mafias diversas, muy bien recibidas por grandes bancos: narcos, traficantes de armas, de animales o de personas, financieros de grupos terroristas, millonarios, eso sí. Estafadores hay de muchas clases, unos nacen, son los estafadores legales (vía administración de lo público): políticos, banca, clero, judicatura, ejército, nobleza... Y peones del poder de ayer que continua hoy: empresarios y otras huestes. Jerarquías antíguas reconvertidas en demócratas, de palabras vacías y gastadas. Otros se hacen malos con el tiempo.
Enfermedades, hambrunas y guerras contra millones de seres humanos más allá de Occidente, Hacia donde vienen huyendo de la muerte y la miseria y mueren aquí, miles cada año en el intento de llegar a una Europa cerrada y egoísta; esa misma que saca provecho económico con las ventas de armas a Arabia Saudí, Yemen o Siria, en un Medio Oriente maldito que se desangra, que deja su herencia de sangre e invasiones desde Afganistán, Irak o Libia, que el tiempo devuelve en odio y terror hacia sus hacedores. 

Comisiones europeas que pactan con asesinos y torturadores libios de cualquier bando, mediante pago, para que impida a la gente perseguida y torturada huir del infierno, y amenaza a ONG para que no se entrometa ¿De ahí nacen los terroristas locos que quieren vengarse de los otros locos y que solo dejan más sangre inocente por el camino en Europa?.  Pero son sus propios pueblos y países los que peor salen parados. Locos de todas clases y gente comprometida que quiere parar este desastre de mundo sin propósito.
Mafias que nacen, mafias que se hacen

Muchos de los que provocan el caos que vive el mundo, más allá de Occidente, son mandamases trasnacionales, terroristas de otra clase, de esa que invade territorios ajenos para robar los recursos naturales de los pueblos: agua, oro, petróleo, madera, diamantes, vía manos untadas a gobiernos corruptos (Guatemala, o Brasil, o Indonesia, o... tantos más. Esquilman los bosques y las selvas, esquilman cientos de miles especies animales; contaminan el aire y el agua. 

Ya no hay pesca de subsistencia, ni tierras para cosechar. Los últimos indígenas aislados o no son perseguidos, diezmados, asesinados, campesinos expulsados que fuerzan a huir para invadir sus tierras y recursos, su modo de vida, siguiendo la tónica de los primeros conquistadores e invasores del Nuevo Mundo.

Grandes millonarios y financieros del mundo, líderes políticos, monarcas o caciques y dictadores nunca elegidos se reúnen en Davos; representantes de monopolios y oligopolios diversificados, esos que han invadido y quemado selvas vírgenes con sus animales incluidos y untado a gobiernos corruptos, que han forzado la desaparición de pueblos enteros, que han contaminado ríos y selvas para robar sus recursos naturales, que han provocado guerras y genocidios y llevado a este Planeta a un callejón sin salida, esos millonarios se reúnen en Davos para decidir como continuar llenando sus bolsillos sin que se note mucho y vistiéndose de demócratas. 

La ciencia a su servicio (no toda, pero sí mucha), marcan el paso, el tipo de vida impuesto, el consumismo ignorante,la publicidad fácil. Y todos/as a obedecer, y a ver series, tele, redes… y lo que nos echen.


A ojos de "positivistas baratos" modernos o pos modernos creyentes, filósofos creyentes, profesores entusiastas creyentes, economicistas macro convencidos (por otros creyentes), religiosos fanáticos todos son creyentes que quieren seguir en su nube.
Dicen por ahí

Embaucadores terminológicos sin escrúpulos, autodenominados demócratas, en realidad estafadores; ladrones de guante blanco de lo público que sirven a sus propios fines y a los de las élites invisibles a quien nadie vota, ladrones del esfuerzo de todos que roban por decreto. Siervos del dinero y del poder, adoradores del dios mercado irregular que sirve a una minoría de privilegiados en el mundo y a sus bien pagados accionistas y funcionarios; también a sus peones a sueldo que en tiempos hablaban de derechos de las mayorías. 

Tras algunos años en el poder, por supuesto votados democráticamente por la plebe que les creyó, han engordado su vendido culo y traspasado puertas giratorias, sentido importantes e hinchados de ego y razones economicistas. 

                                                              Estamos rodeados 

Ya casi no se distinguen de sus amos, los cuidan y se ponen serios delante de su bandera.